Chile, China, España, Egipto, Filipinas, Grecia, Indonesia, Inglaterra, Israel, Jordania, Libia, Marruecos, Portugal, Rusia, Siria, Túnez, son los países donde ha habido manifestaciones sociales en los últimos meses.
Crisis económica, ajustes fiscales, demanda por una educación gratuita y de calidad para todos, falta de democracia, son algunos de los motivos por los cuales se han desencadenado estas protestas. Todo apunta a un hartazgo generalizado por la desigualdad social y la corrupción de los gobiernos.
En un articulo publicado por Clarín el pasado 28 de agosto, el analista político Jorge Castro, puso a la protesta estudiantil chilena como ejemplo del actual proceso que cuestiona las raíces de la desigualdad contemporánea.
"El reclamo general por la igualdad social, que es exigencia de integración e incorporación, busca el camino de la educación más avanzada, único capital verdaderamente decisivo, en las condiciones de una sociedad excepcionalmente competitiva como la actual"
Como es sabido, las redes sociales han cumplido un rol fundamental en la articulación y difusión de las protestas. En España sitios como Democracia real YA! y NoLesVotes, crecen en adeptos y se vuelven cada véz más sofisticados en el uso de medios tecnológicos, ahora incluyeron un mapa interactivo que permite ver en tiempo real cuales son las acampadas que se están realizando en todo el mundo.
Facebook y tweeter no se quedan atrás, en 2004 se creó el grupo del movimiento Kafaya (¡Basta Ya!) que organizó sus primeras manifestaciones a través de Facebook y este año acabó con el régimen del presidente tunecino Zine Abidine Ben Ali, y llamó a la movilización de sus 86 mil miembros registrados en Internet.
Tengan o no incidencia las redes sociales en el desarrollo de los acontecimientos, me parece que lo importante es que las personas estamos deseando un cambio estructural en el orden establecido, exigiendo mayor información y participación en la toma de decisiones en cuanto a nuestros derechos. ¿Quién está haciendo el ordenamiento, quién lo decide? se pregunta Stéphane Hessel en ¡INDIGNAOS!
De todos modos, hay que estar atentos, no podemos dejar que este fenómeno sea utilizado por los medios para hacerse publicidad. La artista Cristine Hill lo plantea en su obra "Revolution fleamarket"
“What happens when we attempt to purchase as much revolution as can be sold to us?”
